Las majaderías de Víctor Carvajal no solo las sufrimos quienes no soportamos verlo actuar frente a las cámaras sino también sus compañeros masculinos en De Boca en Boca, creo yo. Estoy convencido de que esos pobres deben de tragar bien grueso cada vez que este individuo se les arrecuesta en un hombro, los abraza o les pone la mano encima.
Hay gente que tiene esa maña que lo hace sentir a uno muy incómodo en cualquier circunstancia. Pero tener que soportarlo en televisión en vivo debe de ser una pesadilla bien cruel de la que ellos probablemente crean no poder escapar.
Y es que ¿qué van a hacer? Me imagino que solo esperar que la desgracia pase pronto y que sea la última vez. Si fueran tan buenos amigos, tan cordiales y tan alegres como fingen en el set, podrían hablar con él fuera de cámaras y pedirle que por favor no los vuelva a tocar, pero mi tesis es que fuera del programa no se llevan para nada, y que ellos prefieren evitar entrar en conflicto o quejarse del presentador estelar para cuidar sus trabajos.
Igualmente desgraciados deben de ser los camarógrafos y los encargados del sonido con esos mates suyos de "Hágame una tomita aquí o allá", "Póngame una musiquita así o asá"...