Hace pocas semanas ocurrió en San José un accidente de tránsito que, de por sí, habría sido titular de las noticias por sorprendente. En una perfecta autopista de madrugada, un Chevrolet Tahoe chocó en seco contra un muro que separaba dos casetillas de peaje a tal velocidad, que quedó sin trompa. Pero lo más llamativo fue que la conductora era Keyla, la presentadora de un programa diario de Televisora de Costa Rica quien además parece destacarse en redes sociales y que para muchos es linda.
Al tiempo que se difundía la noticia volaron unos videos captados horas antes del siniestro que evidencian la fiesta en la que participaba ella compartiendo licor y bailoteando, lo que explicaba entonces claramente lo sucedido.
Por eso me dio risa cuando leí hoy: Keyla Sánchez negó que el accidente que sufrió haya sido por estar alcoholizada. Y me tomé el tiempo para reproducir el video selfie donde, dando fe de su recuperación de las heridas, dice que solamente su "nucleo super cercano" sabe "sinceramente" lo que pasó, y no da ninguna otra pista.
O sea, que solo los privilegiados dentro de su círculo tienen el derecho de conocer las circunstancias sobrenaturales que intervinieron. Y asumo que ella, como comunicadora social de Teletica, no renuncia a condenar a quien se monte tomado a su carro.